Penetrar y doblar dos veces, desmarques y finalización con tiro o entrada

Artículo publicado el 17 de julio de 2022

Ejercicio del entrenador Eduardo Burgos en su página web, en julio de 2022.

Estos últimos días he publicado diferentes ejercicios de entrenamiento de penetrar y doblar por parejas, acabo de ver un vídeo de José Antonio Santaella trabajando con los jugadores del CP Peñarroya, al que seguirá entrenando la próxima temporada en Primera Nacional Masculina, en el que precisamente trabajaba dicho concepto aunque con la variación de penetrar y doblar dos veces consecutivas (primer gráfico). 

A mí, de camino se me ha ocurrido que ese mismo ejercicio se puede hacer comenzando con un primer pase desde el lado contrario y culminar por el centro con entrada a canasta, también se podría terminar con un tiro exterior.

Diag. nº1 (Penetrar y doblar, 2 veces, finalizar por alero) y diag. nº2 (Idem, finalizar por el centro) 

Jugadores por parejas, el jugador nº1 con balón penetra por el centro dividiendo y dobla o descarga el pase al nº2, el nº1 vuelve de nuevo a su posición inicial, recibe el pase de vuelta del nº2, vuelve a penetrar de nuevo y repite pase al nº2 que se desmarca al alero y tira de tres (también podría entrar a canasta). El jugador que tira coge su rebote y cambia de fila sin interferir el tráfico, el otro jugador cambia directamente de fila (diagrama nº1). 

Con este ejercicio además de practicar la acción de penetrar y doblar, entrenamos pase, bote, juego sin balón, desmarques y finalizaciones con tiro a canasta de tres, de dos o con entradas (se pueden realizar diferentes tipos, normal, con pérdida de paso, a canasta pasada, paso cero, etc).

En el diagrama nº2, podemos ver el mismo ejercicio variando el jugador de inicio con balón. En este caso el que penetra dos veces es el nº2, el que se desmarca sin balón y finaliza es el nº1. He señalizado dos formas de finalización diferente: 1) de color rojo, entrada a canasta por el centro y 2) de color azul, tiro a canasta de tres o de cinco metros. 

Estos ejercicios bien organizados, se pueden hacer por parejas en cada lado del campo y si conseguimos que los jugadores los hagan con ritmo y sincronización, son muy transferibles al juego que se hace con balón y sin balón durante los partidos.